lunes, 6 de febrero de 2017

Tiempo de amar

¿Cuándo entonces es el momento?
Vivimos ocupados, dejando para mañana todo sin pensar que el tiempo realmente pasa, que mañana ya tiene que ser pasado porque se ha convertido en hoy y en nada será ayer. Que no tengo tiempo libre sin pensar que eso no existe, que el tiempo es tiempo y no está para liberarlo, que cada cosa tiene su momento y que algunas tienen que coincidir. Que hoy estudio, que mañana trabajo, que pasado enferman mis padres y el viernes cuando salgamos el que cayó enfermo fui yo. Que no hay tiempo, que el amor ni se busca ni se encuentra; se construye. Que si no le dedicas su momento se marchita, que va y viene, que a veces duele y otras sana, pero siempre hace bien. No se ama en un rato libre, se ama siempre. Buenos días reina, buenas noches mi príncipe, sonríe mientras puedas, haz la sorpresa, aparece cuando menos te lo esperas, regala rosas, prende las velas, ríe, llora, besa, abraza, acaricia, ama. Estoy cansando de no tener tiempo, de que se mida el amor como si fuese por cantidades, como ir al carnicero y pedir tres cuartos de amor para acompañar al costillar, que cuestiones lo que puede o no pasar, de no hacer promesas por miedo a cumplirlas y del "vive el hoy que ya veremos mañana", sonando tanto a algo planificado que si lo sigues con un "no tengas miedo" más estás asustando. Tiempo de hacer cosas, tiempo de amarte hoy, o mejor dicho follarte, para mañana irme a currar, que ya no me esperes en la cama, hacer la compra para uno, llorar en la ducha, recomponerme a base de cafés y borracheras, de canciones moñas que me hielan las venas y volver a amar pasado, preparando la despedida del viernes, que me tengo que ir de viaje. Amar a plazos, nunca amar en realidad, no construir, porque al fin y al cabo, sólo empiezo castillos en el aire cuando tengo tiempo libre. Y al volver con la obra, los cimientos se han derrumbado.

No hay tiempos para amar, no hay tiempos de felicidad. Es un derecho, una obligación, ama siempre, construye, vive y siente.

lunes, 16 de enero de 2017

A mi yo niño

Hola.
Sé que no es la primera vez que te escribo, y seguramente no sea la última. No cesaré jamás de pedirte perdón. Corté tus alas, quise reemplazarte, ser fuerte cuando era tu turno. Te quedaste de nuevo, recibiste mi abrazo y me reconfortó más a mí que a ti. El niño que al adulto su sonrisa le entregó y con solo un gesto de asentimiento perdonó sin mirar el daño causado. Pero tengo muchas cosas aún por decirte.
Quiero contarte, lo que te espera. No es tan malo en realidad, pero he de pedirte que no flaquees, que seas fuerte. Cometeremos errores, poco a poco sentirás que mueres pero no quiero que te dejes caer. Coge impulso y vuela alto pequeño, que es la solución. Aférrate a tus sueños y quita de tu camino lo que no importa, y en eso incluye la noche, porque te querrá engañar. No tengas prisa, disfruta la compañía de los tuyos, que más de un desengaño te vas a llevar. Pasará gente por tu vida que te hará reír, que te hará llorar, que te dirá "te quiero" y desangrará tu corazón, mientras que otros con un "hijo de puta" serán capaces de darte alegría y paz. Sé que no lo entiendes, pero la vida es así. Cuando creces descubres lo frío que es el mundo, aún en verano, a cuarenta y cinco grados, cuando tú estás sofocado sin camiseta y los demás sólo ven un torso que acariciar y después desechar. Es jodido, lo sé, pero saldrás adelante.
Y no quiero hablarte de familia, ya que no sé ni cómo se deben hacer las cosas. Papá y mamá son los mejores, sin duda, aunque te regañen ahora, cada vez lo harán menos, admite que eres demasiado lanzado y haces cosas sin pensar, pero no es malo, te daré un consejo: guarda ese rasgo y no lo pierdas, a veces te ayudará mucho. Y a ella... Abrázala, bésala, dile que la quieres y que juntos tenéis que ir a cualquier lado. No quieras ser más, no sientas celos de ella, solamente ámala. Antes de que sea tarde. Lloraréis juntos, mucho, pero no te separes. Te necesita. Es pequeña, y creerás que crece, pero reclama tu atención. Hazme caso pequeño, nunca la apartes, no sabes cuánto puedes llegar a necesitarla. Corrígela, no la ataques. Aconséjala, no le impongas tu punto de vista.
Y en amor... En temas de amor... No tengas expectativas, llegarán rompiendo tus esquemas. Te crearás ilusiones que vistas en acto acaban siendo una pesadilla en la que inocentes sufrirán, y tú también. Y cuando te llegue el real, conocerás la noche, la discoteca, la fiesta, el desfase... Y estará casado. Y no necesitarás mucho, pero se te irá de las manos, esta vez mucho más que las anteriores, y solamente quedará un moratón que en tres semanas se irá, pero que te recordará durante ese tiempo que ya no hay vuelta atrás y todo terminó. Y crearás una nueva ilusión, pero seréis grandes amigos. Y ahí, ahí es cuando le necesitarás, porque ahí te enamorarás aún más, ahí llorarás, y la verdad, que primero será de felicidad, pero también te terminará de matar, sobretodo a ti, al pequeño niño, al joven infante, serás tu propio defecto y me odiarás, por no sacarte a jugar, por encerrarte sin mas. No le guardes rencor. Lo hará mal, sí, pero aprenderás. Solamente ve bien sus pistas. Y luego... Luego disfruta, de todo. No lo llames atracción si sientes que es amor aunque haya nacido de una conversación y dos encuentros. A veces, dos almas se conectan, porque quizás ya se conocían de antes, y puede que fuesen amantes. Dale su cálido adiós. Y no dudes, si de amor estamos hablando, porque el amor es bueno, y ve a todas. Vas a ser feliz, te lo puedo asegurar. Tendrás los mejores amigos que alguien puede tener, aunque a veces no les veas, pero piensan en ti a diario. Hazles caso, a veces te van a necesitar. Y ama, ama con todas tus fuerzas, no temas volverte a caer. No te puedo contar más porque en este episodio me he quedado. A veces se me hace cuesta arriba, porque a ella no la tengo. y otras no quiero ni verla. Pero, ¿sabes una cosa? Bailamos. Sí, bailamos y enseñamos a bailar. Y también hacemos muchas cosas más. Nadamos, corremos, saltamos, reímos, lloramos, disfrutamos... vivimos. Y hay alguien que nos quiere. Que está sanando nuestras heridas, que no se avergüenza de ti y que se enorgullece de mí. Tiene un nombre y sinceramente, le amamos, en poco tiempo se lo ha ganado. ¿Recuerdas lo de las almas? Quizá ya estábamos conectados, o no, pero lo importante, y lo que te pido, es que no le temas. Sé fuerte cuando llegue, habla cuando tengas que hablar, besa, acaricia, abraza, ama, una vez más, ama. Nunca dejes de amar.

A mi yo niño: El mundo es hostil, y tú no lo ves. Regala tu sonrisa a la gente. Haz feliz. Y sobretodo, ama, aunque te odien, porque no hay nada más bello que amar. Sé que no puedo borrar el mal que hice. Pero nunca es tarde, y tú sigues aquí, toma mi mano, vamos juntos a arreglar lo que se ha deshecho.